Reanudar y la vuelta a la rutina; a recuperar tus hábitos de ejercicio y de alimentación tras un descanso puede no ser una tarea tan sencilla , pero con un plan gradual y bien estructurado, puede resultar fácil y sencillo. A pesar de que no tiene el porqué haber cambiado o afectado significativamente, después de una pausa en nuestra rutina, dependerá de la persona lo sencillo o no, que sea retomar todos nuestros hábitos.
En este post te contamos 5 consejos útiles para retomar de forma eficaz tu rutina tras el verano y las vacaciones.
1. Empezar la vuelta a la rutina de forma progresiva
Retomar tu hábitos saludables no tiene porqué ser de forma repentina ni extremadamente exigente al principio. Especialmente en relación al deporte, si has estado inactivo por un tiempo, es fundamental dar el tiempo necesario al cuerpo hasta que vuelva a acostumbrarse. Es aconsejable comenzar con sesiones de ejercicio cortas e intensidades moderadas.
Retomar el ejercicio físico de forma gradual nos ayudará a evitar fatigarnos rápidamente, e incluso a prevenir lesiones pro sobre esfuerzo. Lo mismo se aplica a la alimentación: no hagas cambios drásticos de un día para otro, sino que poco a poco reintegra alimentos saludables en tu dieta.
Ejemplo: Comienza con un plan de adaptación, escuchando tu cuerpo y la condición actual. Se paciente.
2-Establece metas realistas en el tiempo y alcanzables
Tener objetivos claros es fundamental para mantener la motivación, y cuando la motivación no este de nuestra parte, mantener la disciplina. Asegúrate de que estas metas sean específicas, medibles y realistas. En función de cuales sean tus objetivos y conocimientos, puede ser recomendable contar con un profesional . Por ejemplo ,en el caso de buscar la perdida de grasa o la ganancia de masa muscular, contar con un nutricionista puede ser lo más indicado.
Establece tanto objetivos a corto plazo (como hacer ejercicio tres veces a la semana) como a largo plazo (por ejemplo, perder 3 kg en dos meses o completar una carrera de 10 km en tres meses).
3-Da prioridad a una alimentación equilibrada y variada:
No se trata únicamente de reducir calorías o eliminar ciertos alimentos que hayas podido consumir con mayor frecuencia durante las vacaciones , sino de incluir una amplia gama de nutrientes esenciales en tu dieta diaria. Asegúrate de incorporar carbohidratos complejos, proteínas, grasas saludables, así como frutas y verduras.
Mantén un enfoque flexible, evitando restricciones. Recuerda que puedes disfrutar de todos los alimentos y comidas.
4-Escucha a tu cuerpo y descansa lo necesario:
El descanso y la recuperación son tan cruciales como el ejercicio y la alimentación. Si te sientes fatigado o sientes molestias, es esencial que te concedas el tiempo necesario para recuperarte y prevenir lesiones. Deja transcurrir al menos unas semanas hasta poder recuperar el ritmo anterior a tus vacaciones. Asegúrate de dormir lo suficiente y, si es necesario, incluye días de descanso o actividades de menor intensidad en tu rutina.
Ejemplo: Si tu cuerpo se siente cansado tras los primeros días de ejercicio, elige actividades más suaves como caminar, nadar o practicar yoga para mantenerte activo sin sobrecargar tu cuerpo.
5-Establece una vuelta a la rutina estructurada
La consistencia es fundamental para recuperar los hábitos. Define un horario fijo para tus entrenamientos y comidas. Incorporar estos hábitos en tu agenda diaria los transformará en parte de tu rutina, y con el tiempo se volverán automáticos. Si es posible, intenta realizar ejercicio a la misma hora todos los días para crear un hábito sólido.
Una herramienta que puede ayudarte, es descargarte una de las cientos de aplicaciones en tu móvil, que puedes encontrar hoy en día, para llevar un seguimiento de tus entrenamiento, alimentación o ambas.
Por último recuerda que los suplementos te pueden ayudar a conseguir tus metas, y pueden ser de gran ayuda en tu vuelta a la rutina
En conclusión:
Reintegrar de manera efectiva la rutina de ejercicio y hábitos saludables puede ser más o menos sencillo para cada persona. La dedicación, organización y paciencia son necesarias, pero recuerda tomar el tiempo necesario para adaptarte sin compararte con otros.
Es esencial establecer metas alcanzables, diseñar un esquema que te impulse, combinar una alimentación adecuada con actividad física, y mantener la constancia. Siguiendo estos cinco consejos, estarás más cerca de alcanzar un estilo de vida equilibrado y saludable a largo plazo. ¡Tu bienestar está a solo un paso! Mantén una actitud positiva y flexible.